domingo, 20 de abril de 2008

Adoramos el becerro de oro o adoramos al Señor Jesús??

El ternero de oro
1 * Cuando el pueblo vio que Moisés demoraba en bajar de la montaña, se congregó alrededor de Aarón y le dijo: “Fabrícanos un dios que vaya al frente de nosotros, porque no sabemos qué le ha pasado a Moisés, ese hombre que nos hizo salir de Egipto”.2 Aarón les respondió: “Quiten a sus mujeres, a sus hijos y a sus hijas, las argollas de oro que llevan prendidas a sus orejas, y tráiganlas aquí”.3 Entonces todos se quitaron sus aros y se los entregaron a Aarón.4 * Él recibió el oro, lo trabajó con el cincel e hizo un ternero de metal fundido. Ellos dijeron entonces: “Este es tu Dios, Israel, el que te hizo salir de Egipto”.5 Al ver esto, Aarón erigió un altar delante de la estatua y anunció en alta voz: “Mañana habrá fiesta en honor del Señor”.6 Y a la mañana siguiente, bien temprano, ofrecieron holocaustos y sacrificios de comunión. Luego el pueblo se sentó a comer y a beber, y después se levantó para divertirse.

La amenaza del Señor
7 El Señor dijo a Moisés: “Baja en seguida, porque tu pueblo, ese que hiciste salir de Egipto, se ha pervertido.8 Ellos se han apartado rápidamente del camino que yo les había señalado, y se han fabricado un ternero de metal fundido. Después se postraron delante de él, le ofrecieron sacrificios y exclamaron: ‘Este es tu Dios, Israel, el que te hizo salir de Egipto’”.9 Luego le siguió diciendo: “Ya veo que este es un pueblo obstinado.10 Por eso, déjame obrar: mi ira arderá contra ellos y los exterminaré. De ti, en cambio, suscitaré una gran nación”.
Comentario

Cuantas veces nos hemos encontrado adorando al becerro de oro, adorando a otros dioses de la vida moderna, dioses que nos alejan del Dios verdadero, por ejemplo:el materialismo, los lujos,los placeres.
Debemos adorar al que vive y no vemos, debemos adorar al que se inmoló por nosotros, al que murió en la cruz, al que resucitó por nosotros, y al que nos ha enviado su espiritu santo para acompañarnos, y él donde está?El señor está en el Santísimo Sacramento del altar.
Todos estos dioses terrenales van a pasar , pero la palabra del Señor no pasará.Su amor tampoco pasará, ni su misericordia ni su piedad.}
Adoremos al Rey de Reyes, al Señor de Señores, al León de Judá
ADOREMOS A JESÚS EL NAZARENO